En el gran partida de ajedrez Claudia Rivera triunfa ante los errores del gobierno de Miguel Barbosa

En los últimos días el proyecto político del gobernador Luis Miguel Barbosa se ha caído a pedazos, las malas elecciones, escuchar a quien no debe, las lamentables declaraciones y las traiciones son lo que ha ocasionado quedarse solo en un año ocho meses que va de su administración.

Desafortunadamente Barbosa Huerta hasta el momento ha gobernado de a oídas, se ha dejado orientar por chismes, mentiras e injurias lo que lo hace reaccionar de manera colérica sin razonar las decisiones que toma y que ahora ya le están cobrando facturas.

No es ajeno a Palacio Nacional lo que esta sucediendo en el estado, muchas orejas informan puntualmente al ejecutivo como se esta realizando la gobernanza, lo que en un principio se combatió de manera importante, la brutal corrupción que dejaron administraciones anteriores e incluso, un alcalde emanado del Morena, partido que llevó a Barbosa a la gubernatura, fue enviado a prisión por presuntos actos de corrupción y a la fecha sigue sin obtener su libertad, lo que enviaba un mensaje fuerte de que hasta los de "casa" podrían ser objetos de la aplicación de la ley, sin embargo se cayó en el exceso y los de "casa" se convirtieron en enemigos, inclusive más que los adversarios y detractores.

Casos como el del diputado Jose Juan Espinoza, Torres, Héctor Alonso Granados, el ex Secretario de Gobernación, Fernando Manzanilla Prieto, el de cultura, Julio Glockner, Los Senadores Nancy de la Sierra, Alejandro Armenta y la alcaldesa de Puebla capital, Claudia Rivera Vivanco, comenzaron a sufrir los embates mediáticos de plumas afines a la Coordinación de Comunicación Social, amenazas en las conferencias de prensa del ejecutivo del estado, persecución y desprestigio por no coincidir en su momento con su pensamiento ni sus deseos, llegando a la denostación y la burla social de quién sin mayor empacho los minimizaba.

Pero también, los desafíos, retos y señalamientos fueron más allá, pues alcanzaron los oídos del presidente de la República, sobretodo durante la pandemia de Covid-19 por la falta de apoyo del gobierno federal que siempre fue mencionado por el gobernador Barbosa, la falta de medicinas para diabéticos, hipertensos, niños y mujeres con cáncer y el nulo envío de recursos para hacer frente a la situación, además de la reciente campaña de brazos caídos para apoyar las acciones de la Secretaría de salud federal para apoyar en la logística para la vacunación de adultos mayores, señalando que el gobierno de Puebla apoyará de acuerdo al protocolo establecido por la federación, quitándose responsabilidad sobre este tema para que los reclamos fueran dirigidos a la administración del presidente López Obrador, recibieron acuse de recibo.

En una entrevista Barbosa Huerta afirmó que él nunca había pertenecido a Morena, que era un partido al cuál le había quedado grande el poder y que nunca supo cómo consolidarlo, que era una lástima lo que sucedía y que no se veía participando en la elección de este año, lo cual también fue escuchado en Palacio Nacional.

En medio de toda esto se dio la confrontación con los empresarios, el desempleo, la caída de la economía, la falta de oportunidades, la falta de diálogo, la persecución, surgieron diferencias irreconciliables con la federación, con el Rector de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, Alfonso Esparza, con la presidenta municipal Claudia Rivera Vivanco, situaciones que terminaron en denuncias ante la Auditoría Superior del Estado, en la Fiscalia, y que a la fecha tienen confrontado al gobierno con estos entes de vital importancia para la gobernanza del estado.

Durante la pandemia la soberbia fue terrible, se rechazó el apoyo del Ayuntamiento de Puebla, de la BUAP y de todo lo que oliera a estas instituciones, medios de comunicación sirvieron para denostar mediáticamente su incapacidad fabricada, quedó en evidencia por diversas plumas su falta de solidaridad, empatía con los poblanos cuando siempre hubo capital humano, recursos y voluntad para que la ciudadana no la pasara tan mal el 2020 por el covid-19, pudo más el egoísmo y la soberbia que bien pudieron evitar muertes innecesarias por la pandemia.

Desde el Congreso del Estado, la Auditoría y las conferencias de prensa del ejecutivo salían los mensajes cifrados que tenían nombres y apellidos, ahí la prensa aleccionada redactaba las notas e inclusive tomaba las veces de juez y parte en vez de informar con veracidad y cuestionar con objetividad la información obtenida.

Mientras el Gobernador Miguel Barbosa se ocupaba de esto, dentro de su gabinete varios secretarios fallaban a la promesa de "no mentir, no robar y no traicionar" aprovechando su distracción, una de sus manos derechas durante la campaña 2018-19 daba muestras de deslealtad y corrupción y fue separado en 2020 de la Secretaría de Gobernación en el gobierno interino y en su propia administración, Fernando Manzanilla Prieto quien salió denostado, indiciado y señalado como el líder de banda de los conejos por el propio mandatario.

Pero la cosa no terminó ahí, había más conejos en el gabinete, Vanessa Barahona de Turismo, Julio Glockner de Cultura, quienes también fueron exhibidos en medios de comunicación por su deslealtad y traición, como si esto fuera un logro del gobierno de Puebla que increíblemente festeja.

La cereza del pastel, la salida del incondicional, del izquierdista e impoluto, David Méndez Márquez, quién fue retirado de la secretaría de gobernación en medio de la vergüenza junto con el Secretario de Movilidad, Guillermo Aréchiga, una semana después en medio del escándalo y la probable corrupción, dos hombres de las enteras confianzas del gobernador y que no le quedó más remedio que aceptar que fue engañado por su propia gente, de ese tamaño.

Así, desde el inicio de su administración Barbosa Huerta trató de impulsar a Gabriel Biestro, un joven fiel y leal al gobernador, no a la 4T, que obedecía todo, no importando que, ni quién, cuando, ni donde, obediencia ciegamente, como lo pide López Obrador, pero no precisamente a sus preceptos.

El Congreso de Puebla entonces se puso a las órdenes de un solo poblano y sirvió para colocar afines al barbosismo, como el Fiscal, el encargado de derechos humanos y al auditor, olvidando los temas importantes de los poblanos, como la cancelación de la concesión del agua, legalización del aborto, fideicomisos y otros.

Con este nulo trabajo, con la cartera a disposición, con plumas a modo y aduladores comenzó a fraguarse su proyecto a la alcaldía de Puebla, estos comunicadores todos los días engañaban al aspirante y su jefe, lo adulaban y le decían que era el bueno, que nadie más como el para el puesto, Biestro se las compró y los otros se fueron a casa con los bolsillos llenos.

El viernes por la noche Biestro aterrizó en su realidad, entendió que Eric Cotoñeto nunca operó para su causa, solo simuló, también engaño al gobernador, quién puso recursos y todo lo necesario ya que el proyecto de la continuidad barbosista era el diputado, el viernes todo se fue a la basura, dinero, tiempo y esfuerzo.

Con todo esto que le platicó, no se si coincida con un servidor, pero el mensaje de Palacio Nacional es brutal, tal parece que ya no se confía en Miguel Barbosa y que todas las canicas y la continuidad de la 4T se depositaron en las manos de una joven mujer que desde octubre comenzó a operar su ajedrez de forma magistral para asestar un inminente Jake mate el viernes pasado a toda continuidad del barbarismo. Con todo el aparato gubernamental en su contra, los medios de comunicación y las constantes amenazas y descalificaciones, Claudia Rivera Vivanco le puso un revés brutal a Miguel Barbosa Huerta, quizás el último de su carrera. Ella será la candidata a la presidencia municipal por Morena con la bendición del number one.

Otro mensaje brutal es el espaldarazo y la confianza del gobierno federal a la BUAP quien a partir de hoy se encargará de apoyar a la Secretaría de Salud para colocar más de 75 mil vacunas a personas de la tercera edad en Puebla capital, responsabilidad que el gobierno del estado no quiso aceptar ni mucho menos realizar, de ahí que está decisión la haya tomado la federación, ya que entendieron los muchos mensajes. del gobierno de Puebla al respecto; esto es sin duda un espaldarazo al Rector Alfonso Esparza Ortiz quien desde el inicio de la administración estatal es perseguido y acosado.

Si el gobernador Barbosa hubiese optado por la reconciliación prometida con quienes quedaron lastimados en 2019 por su imposición en la candidatura de Morena, no estaría viviendo un dejavu por lo que sembraron en 2019, quizás otro sería su panorama, sin embargo optó por enfrascarse en una venganza constante, peleándose con todos, hasta con los de casa, desconociendo y renegando de la 4T que hoy ya no le ve como aliado.

Con todo esto el proyecto de la continuidad barbosista mira a otros horizontes y colores partidistas, no de envalde los medios a sueldo que desde el año pasado comenzaron a verle cualidades a Eduardo Rivera Pérez, estos mismos dicen que no hay mejor candidato que el, la razón es la misma, ya tienen lis bolsillos llenos.

Prepárese porque lo mejor está por venir; y es que sin duda veremos una guerra civil dentro de Morena como nunca en la vida política de un partido, las traiciones estarán a la vuelta de la esquina, con todo se atacará a la candidata de Palacio Nacional a la reelección, serán capaces de eso y más, ojalá no volvamos a ver otro accidente aéreo como el de diciembre de 2018, sería muy lamentable además de sospechoso que se bajara ahora a una alcaldesa, pues dijeran por ahí… "No es la primera vez que se comete un magnicidio", de ahí que se deben tomar desde ahora las debidas precauciones.

Y es que dicen que Jalisco nunca pierde y cuando pierde, arrebata.

Ya lo decía Jorge Negrete.

Ojalá y en Puebla aterricé la 4T por completo, en manos de los morenistas está y como dijeran por ahí… La pelota está en su cancha.

Manuel Ponce de León.